Tamaño del texto
Acerca de
En la aplicación de Inese podrá acceder a toda la información del sector asegurador, con noticias, reportajes, novedades y toda la actualidad que le permitirá estar al día de todas las novedades del sector asegurador.
Accede la revista Actualidad Aseguradora y Actualidad Aseguradora Mediación con una experiencia de uso sencilla e intuitiva.
Lea su suscripción a la revista desde cualquier plataforma: PC, Smartphone, o Tablet desde cualquier sitio incluso sin conexión.
¿Necesita ayuda?
Si tiene cualquier consulta o duda sobre la aplicación le atenderemos personalmente en el email web@inese.es o en el teléfono 911 92 48 44
Si lo que desea es darse de baja de la suscripción que realizó a través de la app debe seguir los pasos que le explicamos en el siguiente enlace: Baja
Si es usted suscriptor de Actualidad Aseguradora completo (Edición impresa – Edición digital) puede ponerse en contacto con suscripciones@Inese.es
Privacidad
Seguimiento de Google Analytics
Esta aplicación utiliza Google Analytics para recopilar datos de uso anónimos y exclusivamente en nuestra app que nos ayudan a mejorar nuestra aplicación. Si desea puede desconectarlo
Política de privacidad
Ana M Perez
Directora Desarrollo de Negocio
Jaume Jardon
Director Soluciones Actuariales
Hubo un tiempo en que las compañías aseguradoras, como el resto de entes empresariales, tendían a procesos internos adaptados a lo que consideraban era la mejor solución para su propósito. No había dos maneras iguales de hacer lo mismo, a pesar que el objetivo de todas las compañías, por supuesto con matices, sí era el mismo: ser eficientes en la venta de pólizas y el servicio a sus asegurados. Era un tiempo sin tantas normativas que cumplir, con menos urgencias y con una tecnología que ayudaba lo justo.
Con el transcurso del tiempo, hemos podido ver cómo, poco a poco pero de manera imparable, han ido llegando necesidades de mercado y legislativas, con una exigencia y complejidad cada vez mayor, muy a menudo bien suplidas por consultores externos y con un incremento de las funciones de control y supervisión, tanto internas como externas, lo que ha dado pie a una situación de muchas actividades “orbitales” al núcleo del negocio asegurador.
Para estas funciones de control, como pueden ser las de Auditoría, Riesgos o el propio Supervisor, es fundamental contar con procesos lo más estándar posible y con una gestión de riesgos minuciosa y muy enfocada a la mitigación desde las primeras líneas de defensa.
Esta visión estándar, pone directamente el foco en un componente que siempre ha estado ahí: la solución tecnológica.
Cuando la precisión y la eficiencia son esenciales, la elección entre tecnología basada en herramientas de mercado o desarrollos propios puede ser un factor determinante para el éxito.
Esto afecta especialmente al esfuerzo de las compañías en satisfacer las demandas de las áreas de supervisión y control. En ocasiones el trabajo que se genera con estas actividades, puede llegar a ser algo desproporcionado, por la rigidez de las herramientas que soportan los procesos de la entidad y la falta de detalle y granularidad de la información disponible.
El uso de las diferentes herramientas transita desde el puro desarrollo interno hasta las soluciones de mercado completamente estandarizadas y entre medias, soluciones semi-desarrolladas que, como las propias, exigen todavía desarrollo de código por parte de cada entidad y no se benefician completamente de las ventajas de la estandarización.
Las herramientas de mercado, en general, ofrecen una serie de ventajas significativas. Primero, al ser soluciones ampliamente utilizadas, su fiabilidad y efectividad están validadas de antemano. Además, estas herramientas deben mantenerse al día con las últimas tendencias y regulaciones, asegurando la competitividad sin que las compañías, individualmente, tengan que invertir constantemente en desarrollos. El nivel de estandarización está inversamente relacionado con estos costes.
Por otra parte, desarrollar herramientas propias o personalizar herramientas semi-estándar requiere de una inversión inicial significativa en su implantación. Además, mantener estas herramientas al día con las cambiantes demandas del mercado y regulaciones puede ser oneroso para las compañías. Aquí juega también un papel relevante el riesgo de personas clave, que se refiere a la dependencia de la empresa en individuos específicos con el conocimiento de esas herramientas propias o del desarrollo de código específico para las semi-desarrolladas. La potencial pérdida de estas personas podría impactar negativamente en las operaciones, entorpeciendo la continuidad del negocio.
Todos estos elementos son de vital importancia para facilitar procesos controlados y eficientes, de cara, no sólo a la visión interna que de ellos se tenga, sino también a la imagen que con menor o mayor facilidad se proyecte hacia la supervisión interna y/o externa.
En este sentido, asuntos como la transparencia, la mitigación del riesgo operacional y el buen gobierno son cruciales y juegan también a favor de las herramientas de mercado. Escribir y mantener actualizadas las políticas de la compañía requiere tiempo y esfuerzo, el uso de herramientas propias complica si cabe más ese proceso. No basta con describir y mantener los procedimientos, hay que probar la herramienta en sí, porque ni los auditores ni el supervisor tienen otra manera de efectuar sus controles. Las herramientas estándar permiten la delegación de funciones no-claves mediante un software robusto, seguro y sencillo para el usuario, para una eficiente dedicación a tareas de mayor valor para el negocio.
Finalmente, es importante destacar que aunque son muy claras las ventajas de soluciones de mercado estándar, estas deben ofrecer suficiente flexibilidad para acoger las especificidades de cada negocio y entidad así como disponer de un compromiso de servicio continuado, acompañamiento y acceso a los detalles del producto.
En resumen, más que una moda por las soluciones de mercado, se trata de una robusta tendencia cuyos pilares son la eficiencia económica y la correcta asignación de roles y responsabilidades.