Hacer pronósticos sobre 2021 es un ejercicio complicado, dadas las enormes incertidumbres sobre la evolución de la pandemia y el momento en que podamos afirmar que se ha superado. No obstante, hay algunos aspectos que serán protagonistas.

La caída de actividad económica y la reducción del tejido empresarial es la principal situación que enfrenta este año la Mediación, especialmente según pasan los meses y los efectos económicos del Covid se hacen más patentes. La eficiencia operativa pasa a ser la verdadera protagonista del negocio mediador. Las alianzas estarán al a orden del día buscando incorporar economías de escala y mantener la competitividad.

Si 2020 fue el año en que los mediadores aceleraron su camino hacia la digitalización, 2021 es el momento de adoptar un enfoque estratégico que guíe su estrategia digital. La tecnología es ya un pilar de la Mediación. Eso no quiere decir que todo será virtual, pero sí que nos estableceremos en un modelo híbrido donde la venta y la comunicación con el cliente se realizan de forma natural a través de canales digitales y contactos personales. Esto conlleva un aumento de las inversiones en tecnología, que han alterado abruptamente la planificación de corredores y agentes. Con todo, el contacto personal, sigue siendo la gran ventaja de la Mediación, por encima de chatbots, teleoperadores o plantillas digitales.

“La tecnología se ha convertido en un pilar de la Mediación”

El aumento de regulación es otra de las características que nos toca vivir en 2021. A la tan esperada Ley de Distribución de Seguros debe seguir la publicación del Reglamento. De no prosperar las 17 enmiendas presentadas por los Colegios a través de su Consejo General, no será fácil atender a la avalancha de cumplimientos y exigencias normativas con los medios y recursos de un negocio de estas características. Pasar a un modelo más digital también introduce nuevas regulaciones de privacidad, seguridad y protección de datos. Estas leyes son importantes para proteger la intimidad de los clientes digitales, pero presentan no pocos obstáculos en la relación con el usuario.

No sólo el peso de la tecnología aumenta. Surgen nuevos riesgos que ofrecen oportunidades de servicio y negocio: ciberriesgos y daños medioambientales

Comprender el mundo de las amenazas cibernéticas es adelantarse al presente. Es posible que las personas deseen un seguro que cubra sus pérdidas personales cuando se vean afectadas por violaciones de datos. Sin embargo, las empresas querrán asegurarse contra otros factores de gran impacto en términos económicos como exposición de datos, extorsión cibernética o ataques a sus sistemas.

Las catástrofes y los riesgos ambientales son cada vez más graves y frecuentes. Los Colegios de Mediadores, a través de su Escuela de Negocios, CECAS, llevan años prestando especial atención a la prevención y diseño de mapas de impacto medioambiental lo que los sitúa como una de las fuentes de información más solvente y rigurosa.

La principal tarea de los mediadores en 2021 será así brindar una experiencia digital de alta calidad que, combinada por el contacto directo con el cliente, permita una comunicación abierta sin dejar de cumplir con las regulaciones. Además, búsqueda de la eficiencia y la atención a las nuevas oportunidades de negocio que ofrecen mayor valor añadido, completan una perspectiva estimulante para la Mediación.  I

Javier Barberá .