¿Qué buscan las compañías de seguros?

Juan Antonio Martínez Gijón
Socio de AMG Human y Sportalent - juanantoniomartinez@amghuman.com

En esta última parte del año, el sector asegurador es un hervidero de posiciones ofertadas, cierto que sobre todo con cierta experiencia. Un gran porcentaje de las mismas no verán nunca un portal de empleo y se cubrirán internamente, bien con candidatos de la misma compañía o a través de contactos directos de los empleados o los propios responsables de las vacantes. Otras se gestionarán de manera confidencial por consultoras de selección o headhunters y aproximadamente un 55% serán presentadas en portales de empleo públicos. Gracias a leyes internas de trasparencia y accesibilidad, estas ratios van a ir moderándose. 

Aunque quiero profundizar en otros aspectos relevantes, sí quiero enseñar una foto de lo más demandado a nivel funcional. En puestos con poca experiencia, lo solicitado se centra en perfiles comerciales, agentes, tramitadores y cada vez más universitarios con experiencia en análisis de negocio, data y programación, dominando Python sobre otros lenguajes. Si nos centramos en cargos más experimentados, se busca, además de profesionales de áreas comerciales, perfiles de suscripción de diferentes ramos, responsables de producto, actuarios y profesionales de Data. Y en dirección intermedia y alta frecuenta la demanda se focaliza en Operaciones, Finanzas y área técnica, unido a los encargados de liderar la transformación de las compañías a nivel global. 

Otras cualidades que se exigen

Pero lo exigido al talento va más allá de la experiencia, currículo y estudios. Está más centrado en cualidades personales innatas y/o forjadas a través de la experiencia. Las compañías necesitan: profesionales que disfruten trabajando en equipo para resolver los retos de manera colaborativa; con autonomía y capaces de tomar decisiones en función de su responsabilidad; líderes con impacto y atracción para ser capaces de enamorar al equipo, fidelizándolo por años; con habilidades de comunicación, convenciendo con palabras y ejemplo, involucrando al resto de la estructura para llegar al fin perseguido de manera ágil. Hoy día, que el conocimiento técnico es importante, pero que se puede suplir por otras vías, se necesitan profesionales transversales. Es muy común promocionar al talento fuera de sus áreas, pudiendo ascender un actuario del área técnica a una posición de liderazgo en Marketing o Negocio. Una mentalidad estratégica y capacidad para hacer relaciones duraderas es clave en las entidades. 

El inglés es ya una commodity, se da por supuesto como necesario para la mayoría de los procesos de selección; sin embargo, en un mundo cada vez más globalizado, las empresas buscan otros idiomas, siendo prioritarios el francés y el alemán. Perfiles con experiencias laborales o académicas en otros países son muy demandados, por la amplitud de miras y la agilidad para empatizar con otros profesionales gracias a esa experiencia fuera de sus países de origen. Para posiciones de dirección son muy queridos los consultores estratégicos: profesionales válidos por sus carreras exigentes en consultoría y por su flexibilidad para alternar proyectos, resolviendo retos de diversa índole de manera ágil y con éxito. 

Un punto cada vez más común es la preferencia por perfiles femeninos, sobre todo en puestos de dirección, en su mayoría para equilibrar estructuras descompensadas. 

A modo de conclusión, y fijándonos en las ratios del inicio del texto: las empresas buscan profesionales conectados. Las personas que más relaciones posean y mejor las hayan forjado, más oportunidades de llegar a esos “Jobs ocultos” tendrán.