Florence Cesmat

Directora general de Asefa 

Venir a Madrid supuso para Florence Cesmat “una oportunidad para avanzar” tanto desde el plano más personal como laboral. Entró en el sector asegurador “de casualidad, como mi generación entera”, tras haber estudiado Empresariales en una escuela de negocios en su Francia natal. Después de pasar por distintos puestos, ejerció el cargo de directora de las filiales de SMABTP desde Francia, lo que le permitió tener un amplio conocimiento de Asefa en España. Para la ejecutiva es muy importante la Diversidad, aunque reconoce que aplicarla en una empresa con poca rotación como la suya “es difícil”. Optimista por naturaleza, tiene clara la importancia de separar la vida personal de la laboral. Le pedimos un avance de 2024: “El foco estará en transmitir confianza, dejar claro que no nos vamos a retirar de España. Además de apoyar a nuestra plantilla para consolidar nuestro nuevo modelo de gestión”.

‘A.A.’- ¿Te resultó difícil la decisión de venir a trabajar y vivir en España?

FLORENCE CESMAT.- No. Ya estuve trabajando en España tres años, a finales de los 90. Me casé relativamente tarde, con 40 años y, por decisión mutua, no tuvimos hijos. Lamentablemente, mi marido falleció repentinamente hace cuatro años, al año y medio de ello Grupo SMABTP me propuso coger este puesto en España. La verdad es que me vino muy bien, porque me ayudó a superarlo, a cambiar mi vida. Fue una muy buena oportunidad de avanzar y aquí estoy ahora, en Madrid, desde hace dos años y medio, muy contenta.

‘A.A.’- ¿Dónde empezaste tu singladura en el mundo del Seguro?

FLORENCE CESMAT.- Estudié Empresariales en una escuela de comercio en Francia y entré por casualidad en el sector de seguros, creo que como mi generación entera. Los últimos meses de la carrera los hice de prácticas en Axa. Después, contesté a un anuncio de empleo anónimo, en el que no sabía qué empresa ofertaba el trabajo y en la segunda entrevista me enteré de que era UAP. Comencé a trabajar como suscriptora de responsabilidad civil para grandes riesgos; fue una gran experiencia. La empresa creó un grupo dedicado a los grandes riesgos con suscriptores, tramitadores de siniestros, controladores técnicos, su propia unidad dentro del grupo. En todos los servicios los directores tenían bastante presupuesto para poder contratar jóvenes diplomados y de diferentes carreras; antes solamente seleccionaban licenciados en Derecho, pero empezaron a contratar de Empresariales, Ingenieros, etcétera. 

‘A.A.’- ¿Conocías antes algo del mercado español?

FLORENCE CESMAT.- Sí, ya lo conocía porque cuando entré en Grupo SMABTP, en Francia, lo hice como directora de las filiales y, entre ellas, ya estaba Asefa. Durante esa época trabajé dos años con Cyrille Mascarelle desde Francia; yo era supervisora de estas entidades, incluida la española, por lo que pude conocer un poco lo que pasaba aquí y cómo funcionaba Asefa.

‘A.A.’- Hablando de la actualidad de Asefa. ¿Por qué la venta de Salud?

FLORENCE CESMAT.- Habíamos llegado a un punto en el que teníamos una cartera de Salud rentable, que funcionaba muy bien, pero no tenía ninguna solapa posible con la construcción; son dos mundos muy, muy distintos. La cartera era relativamente pequeña, con menos de 35.000 asegurados. Entonces, en este sector, donde cada vez se ve más concentración, tanto de aseguradoras, como de proveedores, hay que tener un cierto tamaño para negociar buenas condiciones de tarifas. Y, por ello, nos enfrentamos a la decisión de invertir para crecer, pero en un momento en que todos lo quieren hacer y resulta muy difícil, o aprovechamos que la cartera es buena, la vendemos y con el beneficio seguimos invirtiendo en lo nuestro. Así lo  hicimos y lo cierto es que vendimos Salud muy bien.

‘A.A.’- ¿Y lo de convertir la empresa en sucursal, qué ventajas tiene?

FLORENCE CESMAT.- Fue también un proceso de maduración, pensamos que nosotros en España queríamos reforzar todo lo que está enfocado al mercado y a los clientes; la distribución, la gestión de contratos y siniestros y el control técnico. Todo lo demás es un peso sobre la empresa que tiene mucha carga burocrática, lo que en una empresa pequeña acaba tomando mucho tiempo y no aporta valor añadido para la actividad diaria. Vimos entonces la opción de convertirnos. Podíamos pasar a LPS porque SMA SA, nuestra casa madre, ya tiene licencia para LPS en España. No obstante, valoramos que Asefa, su nombre, su gente, su organización tiene una posición muy fuerte, una ventaja en el mercado que quisimos aprovechar, por eso hemos escogido convertirnos en Sucursal. Además, la Sucursal es un establecimiento permanente español, de derecho español, que nos permite guardar esta presencia, pero transferir a la casa madre en Francia la parte legal de la compañía de seguros. O sea, que ahora somos Sucursal de SMA SA en España.

¿Cómo es...?

¿Hobbies y pasatiempos?

Muy simples: hacer deporte, salir a pasear, estar con amigos.

¿Una persona que tengas de ejemplo? 

Muchas, tanto en lo personal como en lo profesional. Tenemos la gran suerte de poder conocer a gente que es muy interesante, muy ejemplar y en mi vida personal también. En eso no estoy falta de modelos.

¿Un lema?

“No hay mal que por bien no venga”. Parece que ser positivo está, a veces, mal visto, pero el ser positivo te hace las cosas más fáciles a ti y a los que te rodean. Los buenos sentimientos son mucho mejores que los malos”.

Eres optimista…

La vida nos reserva muchos eventos, algunos buenos y otros peores; eso no lo puedes cambiar. Lo que sí podemos controlar es cómo los acogemos, cómo los vivimos, qué hacemos con ello. Ahí es donde puedes decidir.

“No nos retiramos del mercado español”

‘A.A.’- ¿Cómo ha acogido el mercado, en general, estos cambios?  

FLORENCE CESMAT.- Me alegro de que se me haga esta pregunta porque, a raíz de salir la noticia de que nos convertíamos en sucursal, leí mensajes que después de esto, y de la venta de Salud, nos íbamos a retirar del mercado español y no es así. 

Salud fue una manera de salvar muchos empleos después de la crisis inmobiliaria. En aquel entonces, Asefa solo hacía Construcción. Para intentar mantener la empresa intentamos diversificarnos. Pero la razón fundamental de ser de Asefa desde el principio es Construcción. Así que volvemos a ello, es lo que mejor sabemos hacer, aunque también habíamos aprendido a hacer bien Salud, pero no estaba en nuestro ADN. Quiero añadir que la reciente inauguración de nuestras oficinas en Barcelona sirve para demostrar que apostamos fuerte por el mercado español.

‘A.A.’- ¿Qué objetivo tienes marcado en tu agenda para este año?

FLORENCE CESMAT.- Operaciones como la venta de Salud y la conversión en sucursal son procesos que pueden causar preocupación en la plantilla y muchas preguntas. Por ello, uno de los objetivos es hacer ver que no queremos que la empresa desaparezca; todo lo contrario. Por eso, entre otras cosas, hemos mantenido el nombre de Asefa y cambiado el logo más a la imagen del grupo SMABTP. 

En 2024 queremos volver a enfocarnos en el negocio de Construcción. Hemos seguido creciendo y queremos seguir así. Mi objetivo es intentar rebajar un poco la presión sobre la plantilla, que pueda trabajar más a gusto, ganando confianza en este nuevo modelo, en esta nueva manera de hacer las cosas con el grupo, que está más presente, ya que ahora tiene que hacer las cosas para nuestra cuenta, pero no en la parte de negocio que esa es nuestra, local. En definitiva, mi objetivo es seguir acabando la reorganización y aportando estabilidad.

‘A.A.’- ¿Qué desafíos crees que tiene el sector asegurador?

FLORENCE CESMAT.- Aunque sea un clásico, diría que uno de ellos es el cambio climático. El sector de la construcción es consciente de su huella, hasta ahora bastante negativa, aunque está mucho más orientado a corregirla. 

Otro desafío es la gran desigualdad en la riqueza de las poblaciones y en sus posibilidades frente al seguro. El mundo rico tiene una expectativa frente al seguro muy alta, como por ejemplo, en Salud. El cliente lo quiere todo cubierto, todo pagado, desde lo más necesario hasta lo más estético. Pero como aún hay gran competencia, muchos actores, hay un nivel de precios que no permite tanta garantía; hay un desequilibrio entre la oferta y la demanda. 

Cuidarse, y saber rodearse, claves para el directivo

¿Qué consejos darías a los jóvenes directivos?

Lo principal, que cuiden de sí mismos. Creo que una de las cualidades de un directivo es que esté en forma, que esté bien, que esté tranquilo y dé constantemente ejemplos de mirar, de escuchar a la gente; no debe ponerse nervioso, ni tener altibajos y para eso hay que estar bien, hay que hacer deporte, hay que tener una vida equilibrada, hay que hacer lo que te hace sentirte bien. Así, cuando llegues al trabajo, no es que no tengas problemas personales, pero los dejas en tu casa, y tú llegas dando ejemplo de ser una persona abierta, dispuesta y con la mente clara para tomar las mejores decisiones. Esto es fundamental. La segunda cualidad es saber rodearse. Esto es más complicado, pero es muy, muy importante: hay que saber tener alrededor gente que son, no amigos, pero sí personas con un enfoque en el interés de la empresa, con capacidad para oir bien todas las voces de la organización.

Trabajando la diversidad

‘A.A.’- ¿Cómo trabajáis en vuestra compañía la Diversidad? 

FLORENCE CESMAT.- Para mí es un tema muy importante, pero cuando tienes una plantilla con cierta antigüedad y muy poca rotación, es difícil manejarlo. Por ello, estamos muy atentos a cambiar el perfil generacional. Por ejemplo, cuando tenemos la posibilidad de contratar alguien en la platilla, buscamos que sea un perfil joven e intentar, efectivamente, que no sean todos del mismo ‘molde’, pero eso es un trabajo que se va logrando cambiar con el tiempo. 

‘A.A.’- En Diversidad e Igualdad, ¿cómo ves que está España? ¿Y respecto a Francia?

FLORENCE CESMAT.- En mi opinión veo que estamos avanzando mucho en ambos países. Incluso diría que, a nivel general, en España es más natural la Diversidad que quizás en Francia, donde se nota un poco forzado el papel de impulsar a la mujer en el trabajo. En España parece que ya hemos superado esta parte, el hecho de que es algo que debe hacerse, aunque sigue habiendo camino y margen de mejora. 

Además, en el mundo profesional o en la alta dirección existe y se plantea la cuestión de por qué no hay más mujeres. Yo creo que es porque en la alta dirección de las empresas de seguros, por lo menos, aunque apostaría que es igual en muchas empresas de servicios, hay un molde desde hace años ya establecido que cuesta abrirlo y para  nosotras es un poco incómodo. Además, también en la diferencia y la forma de actuar según el género. 

‘A.A.’- Podrías darnos un ejemplo?

FLORENCE CESMAT.- Son situaciones que para mí es bastante obvio cuando las vivo. Por ejemplo, cuando estás en un Comité Directivo de una empresa grande, los hombres no hablan de manera distendida; presentan sus proyectos, resultados, etcétera… Pero no suelen hacer comentarios, plantear dudas o cuestiones, a menos que estas cuestiones o dudas hayan sido preparadas anteriormente con lo que van a decidir. No quieren enfrentarse a una discusión un poco incómoda o que le digan “pero no sabes que ya se ha estudiado esto” o “no estoy de acuerdo, no lo vamos a hacer”.

En el caso de la mujer esa espotanedidad es más natural. Incluso, he vivido muchas veces que en el caso del hombre al salir del Comité Directivo te vienen a ver y te plantean cuestiones que tenían que haber planteado antes.

También destacaría el fenómeno de que las mujeres suelen ser menos ambiciosas a nivel de grados o de estrellas en el trabajo. Es otra forma de satisfacerse de su trabajo; creo que hay un nivel en que cada uno se encuentra cómodo. 

‘A.A.’- ¿Has tenido que renunciar a algo para alcanzar tus logros en el ámbito laboral?

FLORENCE CESMAT.- La respuesta claramente es que sí. Toda decisión conlleva renunciar a otros caminos que hubieras podido coger. Una cuestión que ahora me preocupa es afianzar mis raíces. Más cuando me acerco a la jubilación, me pregunto dónde voy a vivir, porque viajo mucho y no tengo raíces en ningún sitio. Mi padre vive en el mismo pueblo desde hace 80 años, lo conoce todo el mundo. Hablo de crear una base sólida de tu vida que mucha gente tiene. 

Yo cada vez que me muevo de país parto de cero; eso tiene su lado bueno pero también malo. 

Separar la esfera personal de la laboral

En tu papel de líder, ¿cómo ves el cambio que están dando las compañías y sus modelos laborales para atraer y retener el talento?

Creo que la clave para retener el talento parece que está enfocado al teletrabajo. Nosotros hacemos teletrabajo dos días a la semana. Está muy bien y estoy a favor, pues me parece que la gente está más contenta. En mi caso particular, sin embargo, la verdad es que no lo practico: mi empresa no es mi familia; para mí, son dos cosas muy distintas. El modelo paternalista no me va para nada y considero que la empresa no es la familia, son dos mundos separados; por eso no me gusta trabajar en mi casa. Cuando llego a casa, estoy en mi esfera personal.