WTW

Ante todo, un espacio colaborativo

Tras un año de reformas y de escucha de las ideas de los empleados,  WTW (Willis Towers Watson) ha estrenado oficinas para su sede central en Madrid. Se ubican en el complejo financiero de la capital, en concreto en el número 11 de la Plaza Pablo Ruiz Picasso; sus 5.000 metros cuadrados muestran un espacio moderno, luminoso, muy ligado a la apuesta por la sostenibilidad de la entidad, madrileño por los cuatro costados y sobre todo abierto a la colaboración de los 750 empleados de la firma en la capital.
 

En concreto, las oficinas de WTW se sitúan dentro del complejo Renazca, un proyecto de renovación urbana que combina sostenibilidad y tecnología. El edificio, objeto de una completa rehabilitación, destaca como un ícono de la nueva arquitectura de oficinas. El diseño, realizado por Savills, se basa en un enfoque participativo que involucra a la dirección y a los empleados, garantizando una completa adaptación a las necesidades de la plantilla.

Las instalaciones están equipadas con tecnología de vanguardia, y los espacios están diseñados para facilitar tanto el trabajo colaborativo como individual. La oficina incluye áreas diferenciadas para el descanso, la concentración y la interacción informal, así como un ala completa destinada a clientes y visitas, con hasta 8 salas de reuniones insonorizadas y aisladas visualmente. 

Uno de los aspectos destacados del diseño es su flexibilidad. Se ha pensado en un concepto modular y con puestos no asignados, fomentando la colaboración continua entre departamentos. Esto promueve la sinergia y el intercambio de ideas, alineándose con las nuevas dinámicas laborales. Los empleados han participado tanto en el diseño como en la elección del nombre de las distintas salas y áreas. 

Las tres principales zonas de trabajo llevan los nombres de los barrios icónicos de Madrid: Retiro, Sol y Castellana. Cada área está decorada con murales de la artista francesa Perrine Honoré, reflejando la personalidad de esos distritos y creando una identidad visual única en el espacio.

Dos de las zonas más valoradas son la cantina, con capacidad para que puedan comer casi 100 personas y el ágora; ambas se han convertido en puntos clave para reuniones informales y el intercambio de ideas, fomentando la colaboración y la interacción social.

En sostenibilidad, las oficinas se han diseñado bajo estrictos criterios de eficiencia energética, logrando certificaciones LEED Silver, AIS y WiredScore Platinum. Todos los espacios están equipados con puntos de reciclaje, y la política de “mesas limpias” reduce el uso de papel, contribuyendo a disminuir la huella de carbono.

La nueva sede también refleja el compromiso de WTW con su Responsabilidad Social Corporativa. La compañía pone a sus empleados y clientes en el centro de su estrategia y, además, fomenta la participación en iniciativas sociales, como el día del voluntariado o las colaboraciones con ONG. Asimismo, apoya la integración laboral de personas con discapacidad.

Otros servicios adicionales para el bienestar de los empleados son una sala de lactancia, una sala de bienestar con fisioterapeutas dos días de la semana y acceso a espacios comunes como cafetería, terrazas y auditorio.